Que mejor que esto para iniciar un viaje...Al delirio.

" Toco tu boca, con un dedo toco el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano en tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja. Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y los ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo de aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua. "
Julio Cortázar

lunes, 20 de septiembre de 2010

He perdido a mi hijo y estoy perdido yo..

He perdido a mi hijo, o no se si me lo han robado, apenas salíamos a pasear cuando una trifulca de padres irresponsables y fámelicos nos obligaron ir a una delegación judicial. Ahí desapareció, detrás de unos cristales de oficinas judiciales, fueron tan solo unos segundos, voltee a ver mi reloj y cuando  busque sus ojos que antes habían estado conectados a los míos sorteando la distancia que nos impedia estar juntos, apenas unos segundos antes, un flash repentino y, ya no estaba. Sus ultimas miradas fueron esquivas,  temerosas, como apenadas, confusas quizás, una combinación de enfado y tal vez odio, o tal vez tristeza e impotencia.
 Hoy hace 10 días que he enviado mil plegarias para recibir una señal de él, he puesto 100 afiches en su buró cibernético para saber si está bien.  Incluso he ofrecido una recompensa porque que me dejen verlo una vez más, cuando menos, o simplemente saber que quien lo tiene o donde está, si es  feliz. Eso sin duda me daría tranquilidad y la fuerza suficiente para abdicar a su búsqueda y dimitir en consecuencia a su alejamiento de mis ojos, de mis brazos, de mis oídos y de mi amor.
 Sólo los que han perdido a alguien amado, saben la angustia que es no saber donde está ese ser en quien va depositado nuestro amor entero y nuestro ser,  sólo quien ha salido a la búsqueda por las calles, preguntando aquí y allá de manera concienzuda y a veces hasta absurda e ilógica, sabe que se siente en las vísceras cada vez que solo hay negativas, cada vez que suena el ring del teléfono, cada vez que llega un mensaje  al celular, cada vez que tocan a la puerta. Solo aquellos que han perdido un pedazo de ellos mismos por su falta de responsabilidad, saben, lo mucho que pesa la culpa, la sensación  que cercena la cabeza con preguntas de, con quien está?, que estará pasando el pobre en ese cautiverio?, estará bien o no?, estará? o ya no estará?. Y finalmente ha sido mi culpa, de nadie más, el es inocente, yo era el adulto, el que sabe como funciona la vida, el que debía cuidarlo desde que llego a mis manos,  después de todo él no me eligió como su guía, como  su tutor , como su padre, ese  ejemplo a seguir, el que supone sabe que es correcto y que no, cuando menos más que él.
Muchos me han ofrecido un remplazo de él, de diferentes formas, y lo agradezco  porque sé que es con buena intención, aunque también sé, que es con una total inconciencia, porque ese tipo de sentimientos no son remplazables, nisiquiera puden ser anesteciados de momentos o de a ratos, simple y sencillamente porque se dan una sol vez en esta vida, una! Aunque se tengan tres  o cinco o cien, de estos seres maravillosos. Porque cada uno es único, irremplazable. Además yo sólo tenía este…Mi hijo
No tengo noticias de él, y la culpa me tortura hasta arrinconarme donde las excusas , cualquiera , son inservibles , mas aun, inexistentes, porque yo sé que fue lo que realmente paso, yo se que el descuido fue mío... , él simplemente siguió su dócil instinto, su naturaleza de supervivencia. Yo soy él que  se confío de sus enseñanzas, la soberbia me ha vencido, el pecado mas grande de todos me lo he vestido con holgaducha extrema, quedando demostrado que mis enseñanzas , mis cuidados, fueron mediocres, miserables, y por eso se fue en otra dirección , porque cualquier cosa brillaba mas que lo que yo había aportado hasta entonces.
Me quiero ir para siempre, este dolor es insoportable, pero si me voy y alguien decide regresármelo? Pero y si no, si deciden que ellos en verdad le pueden dar mejor vida que yo? Y si ya no es ni una ni otra de esas opciones porque existe una tercera donde yo, de cualquier modo tampoco podré influir para verlo?.
Si, ya sé, todo se paga en esta vida, Y me imagino que es lo estoy pagando, y eso me obliga a ver mas detalladamente mis miserias, lo insignificantemente humano que he sido. Que fiasco de persona y que condena tan cruel la que me ha impuesto el destino, seguramente, y eso espero, sea en la justa medida de lo que he hecho, no quiero creer, y no lo creo de hecho , que en un futuro , alguien apareciera diciendo, perdón no era tanta la deuda. De ironías esta hecha también esta vida, mi vida. Me voy, es hora de volver a recorrer las calles por donde caminamos tantas veces,  por donde lo vi crecer durante tantos años de salir juntos, de llevarlo a sus tantas pequeñas actividades, la escuela, la terapia, el paruqe , a que paseara a sus pero...Voy a la calle quien quite, igual lo sueltan, o se escapa, o lo sacan a pasear y lo veo, existe la posibilidad, porque no?, si, también puede que ya no me reconozca,  o no quiera reconocerme, si tal vez, pero  si es porque esta feliz, que bueno, lo aceptaré gustoso, pero si es porque soy peor que el lugar donde lo detienen por la fuerza, eso si sería devastador,  fulminante, que sentido tendría entonces seguir en espera…